NUEVA RELIGION DEL MERCADO DE CANTINFLAS

Ricardo Valenzuela

Cantinflas, With His Puns And Satire, Is Back (And Still Relevant) : NPR 

Durante los últimos siglos las inquietas afirmaciones de pensadores, filósofos, teólogos acerca de cuestiones espirituales, la mayor parte del tiempo manipuladas por líderes, las actividades de las sociedades buscando mejorar sus vidas empezaron a tomar forma específica a través de una nueva ciencia, la economía. Un campo que implicaba conciliar ramas como la filosofía, la religión, historia etcétera, con el propósito de darle bases sólidas. 

Surgiría Adam Smith con “Riqueza de las Naciones” que sería invitación al capitalismo y con su frase tan potente; “no por la benevolencia del carnicero, del panadero es que tengo la cena sobre mi mesa, sino por su interés de lograr una ganancia,” se iniciaba una larga exploración para su significado. Poco después era el turno de Marx con su “Manifiesto Comunista” para agresivamente retar al capitalismo ya operando con éxito en parte de Europa y en EU, como el mejor ejemplo de su versión. 

En esa lucha, supuestamente el ganador sería el capitalismo y su mejor calificación era la revolucion industrial. Finalmente, el comunismo, habiendo sufrido durante un siglo, declaraba su fracaso provocando la disolución de la Union Soviética. Los apóstoles del capitalismo anunciaban el futuro glorioso que le esperaba al mundo bajo su novedosa fórmula del mercado global. Sin embargo, era una historia muy superficial que muy pocos entendieron. Pero, aun en medio de esa ceguera, se procedería a la construcción de ese nuevo esquema titulado, Nuevo Orden Mundial.

Ahora, antes de proseguir con esta denuncia, ratifico mi nunca negociable creencia en el verdadero capitalismo, en la libertad en todas sus formas descritas en la constitución de EU, en los postulados que le dieron vida a EU, gobierno acotado, mercados “verdaderamente libres,” la santidad de la propiedad privada, en la tiranía de la ley, la moralidad de los miembros de la sociedad y, sobre todo, la ética y moralidad de los servidores públicos. Lo  que desgraciadamente se ha estado destruyendo. 

Ahora, después de casi 40 años de esa declaración de victoria ¿Qué clase de reporte podríamos tener? Y es cuando aquel futuro glorioso anunciado, quitándole su maquillaje, podríamos ver una realidad tan amenazadora como el fracasado marxismo que dejó su estela de horror. Porque el trofeo de ganador no fue para el capitalismo democrático prometido. El gran triunfador ha sido un nuevo y horrible hibrido mesclando capitalismo, socialismo marxista, feudalismo, monarquismo, religión.

Y repito, religión. Porque ahora su iglesia es lo que conocemos como “el Mercado,” pero no el mercado libre que habíamos conocido, esta es una nueva iglesia más poderosa que la del Vaticano con su seductor dios llamado “Dinero.” Una nueva estructura falsa que la podríamos visualizar como una gran edificación de cristal en donde una multitud de psicópatas, invadidos por temblores, se enfrentan con su computadoras cuánticas por ese medio celestial, dinero. Una sociedad que, habiendo dejado la moral del esclavo de Nietzsche, han caído en una esclavitud mental y compulsión por el dinero fácil. 

Pero, como la estructura que inventaron es falsa, ese dinero falso esclaviza provocando conductas de hambrientos mercenarios adictos, no a la cocaína, sino a ese dinero y proceden a enterrar cualquier pizca de los valores que hubieran portado pues con ellos no se puede navegar en este nuevo océano. Un vicio que se ha convertido en su “gasolina” más potente que aquellos falsos milagros que le inventaran a los santos. Un vicio que provoca dedicar todo su tiempo a sus trucos y curar sus crudas de dinero. 

Y aquellos aceptados en el club, deshaciéndose de estorbos como ética y moralidad, les permiten ganar dinero y son los exitosos y admirados, aunque, en su vileza, ese dinero se lo hayan robado a un amigo. Pero, el que no lo tiene, de inmediato le cuelgan la etiqueta de fracasado y se le desprecia. Y su religión también tiene mandamientos. 

El primero es producir, no valor, concepto que han hecho a un lado, sino situaciones en las cuales se les permita lucrar en ese mercado falso e inflado. El segundo es consumir, no solo lo tradicional para tener un buen nivel de vida. Demandar más a pesar de ya tener lo queríamos inventando nuevas necesidades. El tercero es competir, pero no en ese torneo honorable y especial que nos provoca ser mejores, sino con actitud asesina declarando enemigos eliminando cualquier competencia como lo hace la mafia. El cuarto es crecer, no intelectual ni profesionalmente, sino en dinero, activos tan fácil de adquirir, en cosas superfluas que requieren todos sus complejos. 

De esa forma operan en ese mercado de bienes falsos emergentes de una estructura ausente de ética, moral e irrazonable que los impulsa a exhibir sus “logros” para alimentar su inseguridad.  Porque, además, para ello tienen impulsadores en esos sacerdotes ordenados en los seminarios del engaño y perversidad. Economistas con sus cifras falsas que les ordenan producir para mantener la falsedad. Banqueros centrales arquitectos del dinero falso y creadores de riquezas manipuladas y, sobre todo, para cubrir sus crímenes sepultándolos en dinero falso. 

Y, los más poderosos y crueles, algoritmos programados para que vomiten el peor de los venenos del engaño manipulando la economía y, en especial, los mercados apuntalando su casino de cartas marcadas. Logaritmos que han creado ecuaciones para dirigir conductas de la sociedad, para predecir resultados en los mercados e, inclusive, provocar esos resultados a su favor. De esa forma ellos ya han declarado que las leyes de su mercado son divinas. Pero, la realidad es una economía global falsa y prendida de alfileres que ya no aguantan. 

Todo sazonado con las perores pasiones humanas. Codicia para, estilo los romanos, beber sin sed y comer sin hambre. Inmoralidad para robar elecciones. Un sistema que crea problemas para luego ofrecer soluciones esclavizantes. Con su crisis hipotecaria le crearon el campo ideal a Obama para avanzar en la destrucción del pais. Eso le permitió tomar control de USAID para saquear el pais con trillones de dolares. Con sus ataques hemos olvidado nuestra naturaleza para convertirnos en piezas de su diabólico ajedrez. 

Trump está haciendo hasta lo imposible remando contra las olas de una fiera tempestad y nadie se da cuenta.                

No comments:

Post a Comment

LOS ORATES TIEMBLAN ANTE ECUACIONES

Ricardo Valenzuela   Lo que está sucediendo en Venezuela en estos momentos, debería ser un urgente llamado a la reflexión para descifrar...