EL MOVIMIENTO DE TRUMP QUE QUIEREN DESTRUIR

Ricardo Valenzuela

 

Se aproxima una gran tormenta sobre EU que cimbrará al mundo entero con repercusiones difíciles de imaginar. En el inter, los usurpadores sonríen satisfechos cuando, una vez más, cometen otro crimen con toda impunidad. Es verdaderamente triste atestiguar cómo los EU teniendo la oportunidad única de terminar con una plaga peor de la que ellos utilizaron con el virus, se haya perdido y al mismo tiempo emerge una horrible realidad. Las instituciones de EU ya no funcionan pues, al igual que en nuestros países durante todo el siglo pasado, son ahora armas del establishment.

Sin embargo, es opinión de la poca gente pensante en EU y alrededor del mundo, que Trump ha iniciado un movimiento que ya nadie podrá sofocar y mucho menos destruir, y el robo de que fue víctima, lejos de neutralizarlo y mucho menos destruirlo, va a continuar con una fuerza que los ladrones de la voluntad de la gente no se imaginan. Y es porque Trump tocó una serie de piezas de un enorme teclado que se habían ignorado y silenciado durante mucho tiempo. Porque en el concierto que ofreció, no se usaron las partituras tradicionales de maestros republicanos ni demócratas. Fue una novedosa melodía utilizando todas esas teclas que, durante mucho tiempo, no les habían permitido participar en el concierto nacional.

Ahora, todos los atropellos, intentos de linchamiento, falsedades, que mucha gente listaba como causas para declarar el partido demócrata terminado, fallecido y solo restaba darle digna sepultura, era de una magnitud tal que tuvieron que acudir al fraude para tomar de nuevo el poder. Pero para la gente de buena voluntad, esas teclas que permanecían empolvadas probaron la armonía y la belleza que pueden aportar a esa nueva melodía. Y, lejos de asumir la actitud derrotista que, obligados y por necesidad, tuvieron que establecer desde que se iniciara el proceso de su abandono, de ignorarlas en vía a la globalización, se dieron cuenta que su abandono no podía ser permanente pues ellos tenían un potencial, ignorado por los nuevos centuriones, que no estaba muerto y era de calificación ilimitado.

 

Porque los preceptos que le dieran vida al país, ahora en peligro, patriotismo, libertad, individualidad, valor ante la adversidad, espíritu de lucha para defender lo que es valioso para ellos, es algo que todos portan en su DNA y permanece intacto. Todo lo que los usurpadores le han hecho a Trump, se lo han hecho a ellos también, lo tienen muy bien registrado y son ofensas que el tiempo nunca borra. Y la actitud de guerreros que Trump desempolvó en ellos, es la misma mostrada en la cinta “Aroma de Mujer’ cuando el personaje de Pacino defendía al chamaco indefenso que el director de su escuela injustamente quería expulsar. Ante la primera avanzada de Pacino retando al director. Este, tratando de callarlo le dice; “bien coronel ¿Ha finalizado?” Pacino responde; “No señor, estas muy equivocado, apenas estoy calentando los motores”.

Ayer, tuve la oportunidad de darme cuenta esa es la actitud de Trump que ha trasmitido a esos casi 80 millones que votaron por él. No van a abandonar la batalla con la cola entre las patas. Ya lo hicieron una vez y esto no se va a repetir. Ellos ya se dieron cuenta que los votos no son suficientes para enfrentar a tan diabólico enemigo, y aquí es cómo cobra importancia el movimiento que ha nacido con el camino señalado por Trump. No, ellos tampoco han terminado y apenas calientan los motores, todo lo contrario, con los eventos de las últimas semanas han tenido la oportunidad de conocer al enemigo cuando, desesperado ante una segura derrota, ha mostrado su verdadera debilidad; su ausencia de valores, de honor, integridad para, igual que los boxeadores tramposos, rellenar sus guantes con yeso ante el pánico de perder.

Bill Bennett, en su famoso artículo de 2016, con gran puntería predecía todo lo que estaba a punto de suceder y sucedió. “Lo matarán antes que dejarlo ser presidente. Podría ser un republicano o un demócrata el que instigue su asesinato. No se sorprendan si Trump tiene un accidente. Personas muy poderosas están entrando en pánico: Barack Obama, Valerie Jarrett, Eric Holder, Hillary Clinton y Jon Corzine, por nombrar solo algunos. Se trata de la dinámica impía entre el gran gobierno, las grandes empresas y los grandes medios. Todos se benefician con los miles de millones de dólares de esta asociación, y es de todos el interés de protegerse unos a otros”.

“Obama, las corporaciones multinacionales y los medios de comunicación deben detener a Trump por cualquier medio necesario. Reconocen que esto podría salirse de control con consecuencias fatales para ellos. Si no se controla, si continúa espulgando y gritando la verdad y hace preguntas que todos los demás temen hacer, Trump podría despertar a un gigante dormido. La elección de Trump sería una pesadilla. Obama ha cometido muchos y muy graves delitos”.

“Nadie más que Trump se atrevería a enjuiciarlo”.

Después, Trey Gowdy, excongresista y uno de los republicanos más respetados, unos meses antes de la elección también hacía otra advertencia:

“China más que nadie quiere evitar otros 4 años de Trump. Todo esto parece bastante conveniente para las naciones enemigas y los opositores de nuestro actual presidente. Y nuestra economía a solo cinco meses antes de una elección, No podría haber recibido un golpe más duro en el momento más perfecto. "No voy a decir que Covid-19 no sea real ... Pero presten atención mis buenos amigos, como lo enormes icebergs que solo enseñan la punta, hay mucho más aquí de lo que se observa a simple vista”.

“¿Es una coincidencia que justo cuando la economía estaba en auge, el mercado de valores a diario estaba estableciendo niveles récord, estábamos ganando las guerras comerciales, los tiroteos escolares se habían detenido, nuestra nación estaba en paz, el partido demócrata es un desastre y su nominado peor?

“Parecía que Trump era una apuesta segura para la reelección después de tener que defenderse durante 3 años de investigaciones e impugnación falsas. Pero, de repente emerge una pandemia y explota una crisis mundial. El mercado bursátil se desploma, las compañías están despidiendo empleados, todo está cerrado y cancelado, los CEO de compañías gigantes están renunciando y las acusaciones están llegando”.

Cerraba Gowdy. “Es la clásica jugada fascista casi perfecta. Controlar la población con pánico, controlar los medios de comunicación, difundir propaganda y enviar al favorito de los fanáticos para desarmar a la población, el ambiente ideal para la manipulación de una elección que tiene a muchos al borde de la locura”.

Y todo sucedió como estos dos hombres lo pronosticaron y todo mundo calló. Pero el movimiento nadie lo podrá detener. Y llegara el día que los americanos de buena fe den las gracias a Trump por haberles mostrado que el enemigo no es invencible. Eso es una garantía.