EL VERDADERO PELIGRO MUNDIAL ¿LAS MUJERES? III

Ricardo Valenzuela

 

Habiendo ligado el infinito potencial del cerebro humano con la manifestación de las acciones de seres humanos especiales y, sobre todo, con resultados realmente difíciles de aceptar más que solo armados con esa fe ciega siempre solicitada por la religión. Es cuando podemos iluminar, aunque con una débil vela, lo que no podríamos distinguir en medio de la oscuridad donde surgen situaciones así, increíbles. 

Porque esos evangelios, entre otras cosas, nos develan una Maria Magdalena muy diferente a la que la iglesia nos había presentado durante siglos. Una mujer que, lejos de ser la pecadora arrepentida rescatada por Jesus, emergía como la discípula especial del salvador. Y esa búsqueda nos llevaría también a conocer los evangelios de la iglesia de Etiopia, que, por infinidad de razones, se había librado de los ataques de la iglesia nacida por gestión del emperador Constantino, habiendo mantenido toda su pureza porque sus miembros nunca cumplieran lo ordenado. 

Evangelios con fisonomía similar a los encontrados en 1945, pero estos configurados con 80 textos que exponían todo lo que las reglas habían prohibido durante tanto tiempo. Y, además, el llamado Testamento de Maria que se encontrara durante el siglo 14 acompañados de los escritos de Enoc, a quien se consideraba el creador de la humanidad, tan combatidos por la iglesia original por órdenes de Constantino. Y el Libro del Jubileo, autoría de los esenios, con quienes había vivido Jesus, exponiendo su disidencia con las fechas de fiestas religiosas.

Sin embargo, con esas referencias a mano podemos también identificar algo de importancia especial. Un evento que sentaría las bases de lo que, a través de los siglos, surgiera como el eterno enfrentamiento entre hombres y mujeres, cuando los apóstoles de este movimiento rebelde fueran invadidos de una gran envidia ante la preferencia que mostraba Jesus por Maria Magdalena. Sin considerar era algo que ella se habia ganado con sus conductas. Algo que se mostrara cuando, ante la muerte de Jesus, sus apóstoles eran presos de gran angustia, ella los consolaba pidiéndoles tuvieran confianza en el maestro. 

Y surgía el machismo ancestral cuando, Simón Pedro les decía a los demás apóstoles: “Que se aleje de todos Mariham pues las mujeres no son dignas de la vida ni de este grupo.” Pero de inmediato Jesús le respondía: “Mira, yo me encargaré de hacerla macho, de manera que también ella se convierta en un espíritu viviente, idéntico a vosotros los hombres: pues toda mujer que se haga varón entrará en el reino del cielo.” Jesus hablaba de la igualdad de oportunidades que debería tener la mujer. 

Pero, lo más importante sería que Jesus la nombraba guardiana de sus misterios. Mostraba sus diálogos con Jesus cuando le explicara por qué la habia elegido para ser la principal trasmisora de los secretos que debían de velar. Los signos de los tiempos. Le entregaría las palabras poderosas con técnicas especiales para alcanzar esos grados superiores de conciencia, utilizando el cerebro con todo su potencial desconocido. Su mensaje debería ser la guía para que el alma en su ascensión pudiera enfrentar y vencer a los siete demonios que debía enfrentar. Demonios como soberbia, ira, avaricia, envidia, lujuria, gula y pereza.  

Y en lo que se conocería como la noche de angustia y sus revelaciones. Le daba instrucciones de cómo elaborar sus mensajes. Primero, toda oración se debía iniciar con la seguridad del dios interior, no pedir que nos diera, sino una sociedad con él invencible. Segundo, la preparación del templo interior para la batalla. Cuerpo con voluntad, corazon como guerrero interior visualizando en la profundidad lo pretendido activando la neuro asociación. Tercero. Ejecutar, no pidiendo todo a Dios, sino solo su ayuda para actuar como equipo en una relación de igualdad con lo divino sabiendo ya logrado en una conciencia unificada. 

Cuarto, el cuerpo y alma unidos tienen a su disposición un esquema numérico y debe aprenderse. En ese esquema surge siempre el numero 40, los 40 dias de ayuno de Jesus, dos palabras en arameo y la invocación del número que liga a la conciencia universal. Quinto, visualizar formas geométricas para la activación de la conciencia celestial, triángulos, cuadrados, y estrellas pues el universo es geométrico y así lo muestran. Sexto, encontrar las 7 chacras en el cuerpo humano con las que se crea el flujo divino y la iluminación que se veía siempre alrededor de Jesus. 

Todos estos pasos con largas y profundas meditaciones. 

La iglesia combatiría la historia y el legado de Maria Magdalena por varias razones. Primero, porque sin duda era una mujer no solo de inteligencia superior, sino que portaba una capacidad de liderazgo que lo mostraría cuando se dedicó exitosamente al establecimiento de grupos de mujeres independientes, algo que molestara a la iglesia en su proceso de nulificación femenina. Era también la representación de rebeldía ante la opresión. Y, en especial, porque era la representación de las verdaderas enseñanzas de Jesus que amenazaban a la iglesia. Y, además, la única portadora de las técnicas de ascensión a una conciencia superior con el peligro que eso representaba.  

María Magdalena, su hermano Lázaro y Maximino, uno de los fieles discípulos, así como algunos compañeros, viajaron en barca por el Mar Mediterráneo huyendo de las persecuciones en Tierra Santa y, finalmente, desembarcaron en el lugar llamado Saintes Maries de la Mer, cerca de Arlés. Posteriormente, viajó hasta Marsella, donde emprendió la evangelización de Provenza, para después retirarse a una cueva, La Sainte-Baume donde habría llevado una vida de penitencia durante 30 años, en los que formara una gran secta de mujeres cristianas. 

Pero, dejaría algo todavía más importante, la decendencia de Jesus con sus dos hijos. En Francia, todavía viven e, inclusive, han formado una organización que ha sobrevivido todos estos siglos conocidos como La Sagrada Sangre y el Sagrado Grial. Uno de sus descendientes, Godfroi de Bouillon, conquistó Jerusalén en 1099, a la cabeza de la primera cruzada, y su hermano Balduino fue uno de los ejes de la formación de los templarios enemigos de Felipe IV de Francia. Y en una pequeña iglesia de esa región de Francia, se le dio el nombre de Maria Magdalena en donde la veneran.