Ricardo Valenzuela
Hace solo
unos años un mundo angustiado con los eventos de un siglo que ya agonizaba,
pero con un hilo de esperanza de gente que aguardando el año 2,000. Fecha que
habia incendiado la imaginación durante todo el milenio que estaba ya a punto
de fallecer. Teólogos, evangelistas, poetas, videntes habían observado el final
del segundo milenio con la expectativa que llegaría con algo trascendental.
Nostradamus notificaba el arribo del Anticristo. Muchos no creían, pero no se
puede negar provocaban una fascinación mórbida en una era en la cual muchos ya
no sabían que creer.
En lo personal, yo estoy seguro de que estamos por iniciar lo que puede llegar a ser el segundo Renacimiento en la historia de la humanidad. Pero, para entender un evento tan importante y las batallas que involucrará, debemos primero hacer un inventario de los diferentes sucesos que han abonado para llevar al mundo a una agonía que ha sido, no solo larga y dolorosa, pero también el preludio de lo trascendental que aquellas mentes especiales anunciarían durante varios siglos.