Ricardo Valenzuela
En estos momentos pienso que, sin importar la forma en que termine, la admirable rebelión de los venezolanos ante la despreciable opresión de los tiranos será una gran lección para el mundo entero. Especialmente para esos aspirantes a dictadores tercermundistas que han surgido en America Latina y que les retumbe en su cerebro el grito, siempre veremos ese nuevo un amanecer sin ustedes. Y, algo muy importante que nos habrá heredado su rebelión, es finalmente llegar a entender lo que realmente ha sido la democracia en nuestros paises.
Desgraciadamente, la palabra democracia se le ha torcido su significado y hasta los dictadores la enarbolan para, primero llegar al poder y, luego, representando esa misma pantomima continúan llevando a cabo elecciones, pero, si no los favorecen, simplemente las roban con toda impunidad. Y, cuando los resultados de sus gestiones oficiales son desastrosos, el único recurso de la gente es el de retirarlos del poder con sus votos. Simplemente ignoran el mensaje para permanecer en el poder, pero, como son tan “demócratas”, lo usurpan siempre con la bandera de la democracia robando los votos democráticamente.