Ricardo Valenzuela
Desde que tengo uso de razón he sido acusado, no de un pecado, sino lo calificado como perder el tiempo. Se me colgaba la culpa de pensar puras pendejadas. Pero, esa supuesta mala conducta me ha permitido conocer rincones donde solo penetra la imaginación, tal vez inspirado por la famosa frase de Einstein; “es mejor tener imaginación que conocimientos.” Y, además, iniciaría un idilio con la soledad tan indispensable para el cabalgar de la mente, y me creaba la actitud de un cuestionamiento permanente prácticamente de todo. Pero, siempre tratando de encontrar respuestas.
Ya como adulto habia algo que llamaba mi atención. Al acudir a la historia veía un mundo que siempre ha estado en guerra y, lo mas impactante, con el tiempo se hacía de la guerra una profesión loable e indispensable. Algo que nunca había podido entender, esta actividad que solo en EU requiere de un presupuesto de un trillón de dolares. Y tratando de entenderlo, me daría cuenta de que el mundo nunca había estado en paz y constantemente surgían graves situaciones que me daban la impresión de no solo ser permitidas, sino que eran fabricadas.
Y en estos momentos lo he visto con nitidez especial. Veo a Venezuela rica en recursos destrozada, una Cuba que llegara a ser la envidia de AL también fuera destrozada, el narcotráfico prácticamente se ha adueñado de Mexico en ruta a esa destrucción, EU comercialmente abusado, invadido por millones de “migrantes” ilegales, las monedas del mundo destrozadas, un Iran a punto de tener armas nucleares etcétera. Pero, lo que me parecía más increíble, es que nadie hiciera algo al respecto. Y, cuando surgiera un atrevido como Trump, se convirtiera en el recipiente del odio mundial y blanco hasta para su asesinato.
Pero, en cierto momento, me llegaría la misma luz que ceguera al prisionero en la caverna de Platón. Me di cuenta de que todo estaba conectado mediante una red que se ha estado tejiendo durante 2,000 años. Una guerra que se ha estado librando en donde la víctima más sufrida ha sido la humanidad. Una guerra en la cual las religiones han jugado un papel central, y solamente pude encontrar las respuestas en los pensadores rebeldes odiados durante estos 20 siglos. Me di cuenta cómo la religión cristiana habia sido secuestrada y, archivando los verdaderos mensajes de Jesus, se creaba una organización política para apendejar a esta sufrida humanidad.
Con el transcurso del tiempo, le seguirían una serie de organizaciones para consolidar ese apendejamiento. Y, de la misma forma que al inicio se enfrentaran los dos grupos de nacientes cristianos, los que serían conocidos como Gnósticos, blandiendo las verdaderas enseñanzas de Jesus, y la iglesia burocrática nacida de la mente del emperador Constantino. Con el triunfo de los segundos se condenaría al mundo a la esclavitud espiritual para beneficio del poder. Los Gnósticos se perseguían con su bandera de las enseñanzas de Jesus como mensajero que llegaba para encender la llama interior que todos tenemos. Nunca para promover el dios amenazador a base de la culpa, el miedo, el castigo, las armas más efectivas para el control.
Y el temor mas grande de los triunfadores era que las letales ideas de los Gnósticos volvieran a surgir describiendo al Dios generoso, amoroso, que no pide sacrificios, ni invita al sufrimiento, sino con su verdad del Dios morando en nuestro interior. Al inicio para esa contingencia, en el Concilio de Nicea nacía el primer Estado Profundo Espiritual estableciendo las reglas de un gran monopolio, no para salvar almas, sino para favorecer al estado con poderosos socios que han estado operando siempre. Era la batalla entre el bien y el mal y, en ese primer encuentro triunfaba el mal.
Ellos inventaron las fatales armas silenciosas e invisibles de gran potencia. Armas que han utilizado la política, la educación, la psiquiatría, la filosofía y, de forma especial, todas las religiones. Esas armas que han provocado el silencio ante los destrozos ya tan comunes en el mundo entero. Armas que con el paso del tiempo reclutarían algo tan letal como puede ser la tecnología, las comunicaciones, las artes, que Schopenhauer las calificara como la única arma contra ellos, por lo que tomaran control de Hollywood, de la ciencia que los llevaría al sacrificio de Galileo, de Giordano Bruno y tratan de neutralizar a esos enemigos modernos rebeldes como Elon Musk.
Y es cuando yo pregunto ¿Por qué financiaron a Marx en su ruta del Manifiesto Comunista, a Lenin para destruir Rusia, a Hitler y formar la Union Europea, a Fidel Castro y destruir Cuba, el asesinato de soñadores como Kennedy, Lincoln, Patton, Forrestal? ¿Por qué decidieron impulsar a China saqueando a EU, instalaron al Papa comunista Francisco, por qué retiraron a Benedicto XVI, les permitieron instalar la herramienta de saqueo mundial como el FED, y destruyeran a Gaddafi que pretendía formar la moneda africana respaldada con oro que luego desaparecieran? Y la mas importante ¿Por qué se permitió la elección de Obama con la tarea para destruir EU?
Y yo creo tener la respuesta. En 1945 se encontraron en Egipto los evangelios perdidos autoría de los verdaderos discípulos de Jesus como Tomas, Felipe, Judas y Maria Magdalena que, por razones desconocidas, cayeran en manos de Juan Pablo I y lo sedujeran. Pero, 33 dias después de su elección, moriría en lo que fue un claro envenenamiento. Porque esos evangelios mostraban la gran verdad. Esos escritos mostraban al verdadero Jesus como el espejo de nuestro poder divino y derrumbarían la farsa de un dios enojado, cruel, que castiga si no seguíamos sus reglas. El dios del miedo y la culpa.
Con este descubrimiento que inicialmente caminara lento con las secuencias de la guerra mundial, postergaría su llegada a las manos verdaderamente espirituales. Después de grandes enfrentamientos han logrado su destino celestial y se ha iniciado la guerra final entre el bien y el mal. De forma clandestina se les presentaron a tres expertos del tema para verificar su autenticidad. Una monja quien de inmediato se retiró de su congregación, otro aparecería muerto sin explicaciones, el tercero ha desaparecido.
Creo el mundo tiene la gran oportunidad de recobrar su espiritualidad en este nuevo enfrentamiento. En un frente, los que defenderán lo que siempre hemos tenido. En el otro, los que quieren despertar de esta pesadilla. La primera fue ganada por los falsos. Ahora deberá de continuar con guerreros listos para el combate.
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