Ricardo Valenzuela
Por fin amanece, ha llegado el día y se marcha la oscura noche de nuestras pesadillas. Y en EU es un día especial en que Juramenta Donald Trump como el presidente #47, el día en que se inicia el rescate de este país de las garras opresoras. Hoy es el día de la justicia que, durante tanto tiempo, no solo se ha negado, sino que se han utilizado sus herramientas judiciales, que negaran la justicia a unos, para destruir al hombre que hoy llega a la presidencia. Un hombre que durante 8 años fue sujeto de todo tipo de ataques de la peor bajeza de parte de un gobierno corrupto.
Hoy es el día que renace la esperanza hecha realidad, el día de la justicia recuperada de sus verdugos, el día en el cual el futuro de nuevo luce iluminado pues se ha recuperado. Y, especialmente, el día de la gran recompensa para este hombre que ha vivido un verdadero calvario, un hombre que durante tanto tiempo se batió contra esas fuerzas enfrentándolos en cada campo de batalla con el coraje de un héroe y la sonrisa de un conquistador. Muy pocos seres humanos hubiera soportado los ataques que este hombre tuvo que sufrir, los de su familia, los de sus negocios, los de sus amigos, y jamás tan siquiera considerara abandonar la batalla tirando la espada.