Ricardo Valenzuela
MARIA ORCI 1943
Continuando con el envío de un escrito emanado de uno de esos intelectuales profundos, solitarios, como la versión mitológica describiendo esa lucha a la cual yo tanto me habia referido. Me gustó tanto que me di a producir mi interpretación de lo recibido y ahora presento la continuación
Después que el grupo organizado por Spinoza y Leibniz fuera descubierto y prácticamente desactivado, el único miembro que, después de conocer bien a ese poderoso enemigo, Ana, regresaba a la casa de Spinoza para proponerle seguir adelante con la lucha que habían iniciado, pero, ya muy consciente del poder de esas fuerzas que casi los destruyeran. Su deseo adquiría nueva fortaleza cuando el gran Leibniz también regresaba para sumarse. Con el instrumento que Spinoza habia logrado retener, pudieron transportarse a su nueva sala de control y hacer una evaluación.
Se dieron cuenta que, contrario a lo que ellos pretendieran, la humanidad estaba siendo reconstruida como una maquinaria general para despojarla de su voluntad y funcionara como eso, una maquina siguiendo el mandato de su mecánico. Después de contactar a los otros miembros, con la información recibida aceptaban reunirse todos en casa de Spinoza. Y, con un encargo especial, todos llegaban con sus instrumentos similares al de Spinoza que lograban mantener después de ese primer ataque. Se daban cuenta que estaban a punto de perder todo lo que habían avanzado a manos de esa fuerza diabólica, “La Orden.” Después de un corto intercambio, aceptaban todos seguir con esta lucha contra lo que amenazaba a la humanidad