Ricardo Valenzuela
No cabe
duda de que este periodo de tiempo entre la elección y la toma de protesta de
Trump—básicamente de 75 dias—ha sido y promete seguir siendo algo difícil de
describir puesto que no le ajustan palabras como especial, intenso, diferente, y
debemos buscar algo que lo pueda dibujar fielmente y creo sería es el histórico
preludio de un gobierno que, definitivamente, también será de etiqueta histórica.
Ayer, Trump tuvo una presentación que me ha parecido califica para esa etiqueta, histórica. Un mensaje en el que abandonara todo el protocolo y lo tradicional de los políticos profesionales. Anuncia algo que me ha dejado con la boca abierta. Dista mucho de ser un plan de gobierno, algo en lo que él no cree, es más bien una lista de las acciones más importantes que con urgencia estará activando desde su primer día en esta nueva presidencia, la cual combina con los pasos para poder lograr sus ambiciosos objetivos.