¿POR QUE EXISTEN LOS MADUROS, PEJES, FIDELES, OBAMAS?

Ricardo Valenzuela

 

El 16 de octubre de 1909, en las ciudades fronterizas de El Paso, Texas, y Ciudad Juárez, Chihuahua, ocurrió uno de los hechos histórico-diplomáticos más importantes, no solo del Porfiriato, sino para la historia de Mexico: se reunieron los entonces presidentes de México, Porfirio Díaz, y el de Estados Unidos, William Howard Taft, con el supuesto propósito de fortalecer los lazos de ayuda mutua, entendimiento y cooperación. 

Pero, habia algo más en la agenda de Taft que cambiaría el futuro y el destino de Mexico. Pero no ese futuro que en las películas románticas siempre se describe como un bello arco iris anunciando el final de una destructora tormenta, luego sale un sol radiante que aparece presagiando la llegada de tiempos especiales para lograr los sueños anhelados y esperados. 

No se mencionarían motivos que fueron delicados, entre ellos: México se negó a seguir prorrogando el arrendamiento de la Bahía Magdalena a los Estados Unidos; el régimen porfirista comenzó a privilegiar a los capitales europeos en detrimento de los estadounidenses; y, también, por la ayuda que habia prestado el gobierno mexicano a José Santos Zelaya, expresidente de Nicaragua, derrocado gracias a una intervención de EU. Pero, habría un punto especial, la exigencia de Taft para el inicio de la reforma agraria a lo que Diaz se negara rotundamente. 

Para entender lo sucedido debemos conocer a los dos hombres que desacordaban, sus ideas, intenciones y los motivos que cincelaban sus acciones. Taft, además de sus credenciales de Masón, portaba otra que no le mostraría a don Porfirio. Era también miembro del poderoso grupo secreto muy bien dotado para buscar esa clase de poder desconocido, poder total. Taft era cardenal de la iglesia Skull & Bones residente de la Universidad Yale. Un elemento que se convertiría en la factoría de políticos de alto nivel y presidentes de EU. 

El padre de Taft, que inspirara a su hijo, era un abogado graduado, como su hijo, en la Universidad de Yale y miembro de Skull & Bones ese nuevo y poderoso jugador armado con la filosofía Hegeliana totalmente contraria al liberalismo clásico donde el estado era subordinado al individuo. Puesto que el Hegelianismo, como después lo veríamos en el nazismo y marxismo, el Estado era supremo y el individuo solo existía para servir al Estado. Ese Hegelianismo era ya propietario de gran parte de la clase política de EU que, además, se le sumaba el apetito por nuevos territorios. Ya no vivía Buchanan quien, ante un congreso embriagado de poder, pedía tomar el resto de Mexico. Pero, Buchanan se oponía con su gran argumento, en el sur habia demasiados indios. 

La reunión se empañaba con el rechazo de don Porfirio a tantas demandas. Afirmaban los testigos que, ante las negativas, se provocaba un choque presagiando lo que le esperaba a Mexico. Así, EU se convertía en ese poder oculto que le diera cauce a la revolucion mexicana, pero no por la justicia social que tanto han gritado los demagogos, sino para, cortesía de esa revolucion, un Mexico destrozado fuera presa fácil para su conquista moderna de parte de ese poder naciente de las oligarquías globales con su potente arma, el sistema bancario global. Y, por supuesto, la clase política con lideres como Maduro, Chavez, el Peje que han condenado a todo el continente. 

De inmediato, a través de las logias masónicas que cobijaban a Madero en EU, se le diera permiso para penetrar Mexico a través de Chihuahua y estallara esa insensata revolucion en medio de un esquema de confusiones ideológicas, económicas y políticas. Pues, Madero, al igual que Porfirio Diaz, era “liberal” y al mismo tiempo masón de altos grados en ese laberinto de ciegos. Porque Juarez mostraba el mismo perfil de liberal sazonado con masonería. Además, en el congreso de EU ya no militaba Lincoln, víctima de los oligarcas globales cuando se habia opuesto a la toma de la mitad del pais y, sobre todo, que se tomara el resto que era la intención del presidente Polk. 

Como preparación del terreno para la nueva conquista, Mexico estaba ya invadido de masones en donde, inclusive, el Emperador Maximiliano, igualmente habia presentado credenciales de masón y de liberal. El motivo por el cual su hermano, Emperador de Austria, Francisco José, había hecho lo imposible para exiliarlo a Mexico por el odio de sus ideas liberales. Algo que después provocaría una gran desgracia. El príncipe Rodolfo, heredero a la corona de Austria sería el protagonista. Su padre, Francisco José, para asegurar una educación de primera para su hijo, contrataría como su tutor al gran economista Carl Menger, quien con el tiempo se le adjudicara la fundación de la economía austriaca de economía. La verdadera representante de la concomía libre. 

El príncipe, sin que su padre se diera cuenta, se convertía al verdadero liberalismo económico, político y, lo más increíble, al haber tenido gran relación con su tío Maximiliano, Emperador de Mexico, cuando Menger le informaba su tío había sido también su discípulo, entendería el liberalismo frustrado que Maximiliano quiso implantar en Mexico. Cuando el emperador furioso se diera cuenta, pues su hijo jamás lo ocultaría e, inclusive, lo debatía con él informándole que Maximiliano también había sido un verdadero liberal. En una trama increíble y sospechosa, ambos, tío y sobrino, serian asesinados en fechas distantes.     

De esa forma, dos verdaderos liberales que podrían haber sido oportunidad del rescate y salvación de Europa y de Mexico de la vergüenza de estos momentos, eran sacrificados en el altar del hegelianismo especial para, con la emergencia del nuevo poder omnipotente del Estado, la oligarquia le dieran la bienvenida. Pues ellos serían los propietarios del estado y su nuevo disfraz, las corporaciones explotadoras, siempre colgadas de un nuevo sistema financiero internacional emanado de la diabólica mente de Mayer Rothschild y su mercenario moderno, Soros. 

Esa oligarquía que, habiendo narcotizado al mundo con sus armas silenciosas, continúan saqueándolo y oprimiéndolo en donde al oprimido es elevado porque ese sufrimiento es su virtud.  Pero, ambos, opresor y oprimido son culpables pues cooperan en la ignorancia, y, aunque parecen afligirse mutuamente, en realidad se afligen a sí mismos. Y solo podrán ser rescatados cuando abandonen la ignorancia que les inocularon para mojar la pólvora divina de la chispa celestial.