Ricardo Valenzuela
Habiendo estado
ausente de la información política de mi país que solo me provocara ulceras,
ayer tuve acceso a una fotografía de la presidenta Claudia con un Manuel Espino
rebosante de felicidad, lo que provocara el regreso de mis ulceras y tratara inútilmente
de poner mi mente en paz. Espino es un personaje que apareciera como miembro
del PAN en mi estado de Sonora, para iniciar su migración por todos los demás partidos
hasta terminar en MORENA. Que es la misma trayectoria que siguiera nuestro
gobernador transitando PRI, PAN hasta su entrega al Peje.
Me hizo recordar la reunión de mi tío Gilberto Valenzuela con Elias Calles después del asesinato de Obregon. Calles conociendo la calidad moral de don Gilberto y su cercana relación con Obregon, quiso neutralizarlo cuando se dirigió a él así: “Licenciado, hemos formado un partido político para incluir a todas las fuerzas revolucionarias y ya no se expresen desacuerdos con la guerra, sino que lo puedan hacer a través de la política. Y hay una gran corriente de simpatía para su candidatura a la presidencia ¿Qué le parece?”