Ricardo Valenzuela
Algún observador externo podría haber puntualizado que, eliminando grandes regiones del interior, eran solo pérdidas entre los más radicales desarrollos históricos de los EU. Pero ¿Algunos estadounidenses de las costas pensaron que desindustrializando y destruyendo el valor del trabajador tradicional no tendría consecuencias culturales y económicas, sobre todo considerando el histórico papel de las clases medias como custodios de los valores nacionales?
La cultura popular de EU refleja esas nuevas normas. Los ganadores costeños son descritos en programas de TV y cintas psico dramáticas como inteligentes, exitosos, caminando hacia éxitos mayores, altamente móviles, orgullosamente neuróticos, auto absortos cuando caminan hacia restaurantes cinco estrellas, con los clásicos melodramas en sus oficinas. En contraste, las clases trabajadoras en el interior que representan todo lo contrario, aborígenes solo presencia para caricaturas, que todavía piensan Sara Palin hubiera sido una extraordinaria vicepresidenta. Los describen en los programas de TV como Ice Road Truckers, Duck Dinasty, con sus gorras, vistiendo sus overoles y gritando con acentos rurales, toscos, bruscos. La mayoría corajudos siempre listos para maldecir y pelear. A su alrededor mucha maquinaria que ya no funciona, sus chozas y su tráiler, completan su panorama.