EL GRAN SATANÁS LLAMADO SOROS

Ricardo Valenzuela

Dicen que para conocer la historia de los paises, debemos penetrar sus trastiendas y encontraremos hombres que, para bien o para mal, dibujaron de forma profunda sus destinos ya fuera hacia la grandeza o hacia sus maldiciones. Así tenemos ejemplos como el gran Erhard como el responsable del rescate de la Alemania destrozada después de la guerra y regresarla a su sitial que se la conocería como el Gran Milagro Alemán.

De igual forma, en estos momentos que estamos atestiguando el destape de la pestilente gusanera que ha llevado a cabo Trump, en medio de esas sorpresivas malas noticias, debemos también identificar a los responsables de lo que claramente ha sido un gran esfuerzo para destruir EU. La lista es muy larga, pero, todos los nombres que aparecen en ella tienen una coincidencia y la misma liga, George Soros. Un misterioso hombre que pareciera tener un mandato especial, propagar el mal y lo diabólico por todo el mundo, lo que lleva a cabo de forma muy efectiva.

Soros es un billonario, pero, al rastrear su fortuna, encontraremos una verdadera carnicería. Originario de Hungría, nos podemos remontar hasta la segunda guerra mundial en la cual, siendo casi un niño, ocultando ser judío, establecería una sociedad con los nazis ya ocupantes de su país, para saquear las propiedades de los judíos con lo que haría su primera pequeña fortuna. Sus actividades pasarían desapercibidas y, al finalizar la guerra, se trasladaría a Londres para estudiar en el London School of Economics. Su estancia en ese pais sería descrita en un libro titulado; “Soros, El Sicario de la Oligarquia Británica,” su inició así en las grandes ligas.

Su currículo es tan amplio que requeriría miles de páginas, pero, una de sus especialidades ha sido la promoción del narco terrorismo, con resultados más destructivos que la guerra del opio en el siglo 19     en China y la India. De un descendiente de esos traficantes, aprendería que las drogas era algo que permitiría conquistar y dominar países por todo el mundo, porque, ligadas con tequila, les destruirían la energía y la vitalidad. Incluyendo esa actividad especial en el menú de sus actividades, se convertía testaferro del Imperio, que encubre la repugnante política de saqueo conocida eufemísticamente como globalización.

Así llevaría sus operaciones a toda America Latina, utilizando como herramientas sus diabólicas organizaciones Human Rights Watch, la Fundacion Soros y su Instituto de Open Society. Llevaría a la presidencia de Perú al candidato pro-drogas Alejandro Toledo, provocando el derrocamiento de Fujimori. Operaria luego en Colombia arreglando que Richard Grasso, presidente del New York Stock Exchange, tuviera una entrevista con el líder de la guerrilla FARC para ofrecer sus servicios. ¿y Mexico?

La nueva presidenta de Open Society Foundation de Soros, Binaifer Nowrojee, en relación con su incursión a Mexico, considera la nueva presidenta de Mexico es alguien que realmente posee los valores de la sociedad abierta que representan, que ha entregado resultados, de acuerdo a lo sugerido, y está considerando el bienestar del país, por lo que Open Society encuentra esto extremadamente esperanzador” porque ya es parte de nosotros. Dios nos agarre confesados.

Debutaba en el territorio más anhelado de la Oligarquia Global, EU, invirtiendo 100 millones de dolares, para apoyar diversas organizaciones de la media. Financiaba al Columbia Journalism Review el abanderado de los medios de comunicación en EU. Muy pronto controlaría buena parte de los medios para iniciar las llamadas fake news (noticias falsas) Le daba vida a Media Matter ubicando como líder una gente de Obama y Clinton, David Brock, para iniciar agresiva ofensiva contra Trump. Pasaba a reclutar Face Book y el resto de las redes sociales para lo mismo.

Así, con Soros a la cabeza, llevarían al gran destructor de EU a la presidencia, Barak Obama, alguien que el gran, Charles Krauthammer, advirtiera como el peligro más grande en la historia de la nación, pero nadie lo escuchó. Y llegaba en medio de una crisis que, con todas las herramientas de Soros, le permitiría avanzar su marxismo camuflajeado hasta unos límites jamás imaginados. La tarea de la Hillary era darle el tiro de gracia. Su especialidad.   

Sin embargo, en la primera aventura de Trump hacia la presidencia, sus amos no se habían dado cuenta del gran peligro que representaba, pues, como lo definiera uno de los tantos agentes del FBI trabajando en la campaña de la Hillary. “La posibilidad de una victoria de Trump, es de una en un millón.” Y lo que representaba Trump, siendo todo lo opuesto a lo que ellos pretendían, no se prepararían para alguna sorpresa. Trump se definía en contra de la soberanía corporativa, que debía ser tomada por compañías trasnacionales y las instituciones financieras globales. Pretendían que el futuro fuera dictado por ellos, no por los ciudadanos.

Pero, contra todos los momios Trump ganaba la presidencia. Así nacia la nueva estrategia de hacer imposible que operara. Lo atacarían durante sus 4 años con dos intentos de derrocarlo y, para llevar sus acciones a lo temerario de su locura, le fabricaban la pandemia para destruir lo poco que habia logrado. Y ya en medio de su desesperación, simplemente le robaban la elección. Era la gran oportunidad de Soros para, ya de forma descarada, ante un mundo que no entendía lo que sucedía, propinarle al país profundas estocadas que lo llevaran a un nivel de agonía irreversible. Con la presidencia en manos de un deshabilitado, el timón de la nave era tomado por Obama y Soros.

Todas las políticas asesinas de esos cuatro años serian órdenes que la oligarquia global le hacia llegar a Soros quien, a su vez, de inmediato se las trasmitía a Obama. Así, la estrategia de inmolación del país inundándolo de drogas, surgia de forma inexplicable en lo que parecía una sociedad con el narco gobierno de Mexico y carteles operando con impunidad. El diluir la población blanca la precipitaban abriendo la frontera para la penetración de 15 millones de ilegales de todo el mundo. Las finanzas del país se llevarían al nivel de suicidio nacional. La deuda nacional se duplicaba. Los nuevos consentidos ya no eran los negros, ahora eran los LGTBQ.

Pero, Trump ha regresado. Y, con sus sospechas bien afiladas, tomó la decisión más inteligente de su vida. Llevar a cabo una profunda auscultación de este país en medio de su gravedad muy a la vista, después de los últimos 4 años en que sufrió unos abusos que parecieran fueron los aprendidos por Soros en el holocausto donde participó. Porque este hombre es demoniaco.