Ricardo Valenzuela
Por aquel año del 2018 Art Laffer siempre comentaba que la caballería pesada y el verdadero espíritu temerario de combate bien conocido de Trump, sería desatado libre en su segundo término, pues, en aquel primero, además de la clásica cautela con la que actúan todos los presidentes para no perjudicar sus reelecciones, Trump estaba siendo frenado para no avanzar más allá de lo prudente a base de tantas agresiones que se coronarían luego con aquella destructora pandemia. Y, subrayaba, esta si será una batalla más que temeraria.
Bueno, Trump está de vuelta y, como afirmara Laffer, ya antes de tomar la batuta legal claramente ha estado enviando mensajes que van muy de acuerdo con su famosa temeridad. Uno de esos mensajes es el lugar cercano que le ha dado a un hombre con perfil muy diferente a los de toda su tropa. Su nombre es Sebastián Gorca, un impresionante hombre de 1.97 de estatura nacido en Inglaterra de padres polacos. En la primera vuelta de Trump fue un cercano asesor, pero, también como uno de los más temidos por las huestes del infierno.