Ricardo Valenzuela
En mis novedosos encuentros con quienes siempre he considerado los filósofos más grandes en la historia de la humanidad, el evento que me enfrentara a Nietzsche me produjo algo interesante. Descubrí que el filósofo alemán histórico citaba como uno de sus inspiradores a Ralph Waldo Emerson, un pensador americano que años atrás me capturaba como uno de sus lectores y su admirador. Mi liga habia nacido por recomendación de mi padre gran amante de la filosofía.
Y, el que un hombre como Nietzsche, conocido por sus agresivos rechazos del mundo entero, su reconocimiento de Emerson era para mi un gran aval. Lo primero que originalmente me atrajera del pensamiento de Emerson, fue su famosa Ley de Compensación que se resumía afirmando, todas las acciones tienen consecuencias. Además, todas las definiciones tienen sus respuestas. El negro tiene el blanco, hombre-mujer, bueno-malo, luz-oscuridad. La mecánica creando fuerza aumentando la inversión.