Ricardo
Valenzuela
Hace unos días, provoqué cierta tolvanera cuando después de un viaje de Tucson a Hermosillo, dedicara un escrito a la Fellínica aventura que viví para poder penetrar mi país. He recibido infinidad de mensajes solidarios ante el enanismo burócrata mexicano. Sin embargo, me llegan algunos exhibiendo su molestia y de forma poética, proceden luego a desenvolver una larga lista del por qué, no sólo rechazan mi critica, ofendidos defienden el honor patrio con ese gran orgullo de: “México RA, RA, RA.”
Uno de tantos orgullos sonorenses ignorados, es el gran escritor Oscar Monroy, quien, siendo yo estudiante en el Tecnológico de Monterrey, publicó un librillo que me impactara como pocos: “El Mexicano Enano.” Ahora pienso que fue un preludio para el famoso éxito internacional; “El Manual del Perfecto Idiota Latinoamericano,” pues la obra de Monroy, casi 30 años anterior a la de Vargas Llosa, Montaner y Apuyelo, describía al clásico mexicano en toda su enanismo espiritual, lo cual, se pudiera aplicar al latinoamericano en general.