EUROPA SOCIALISTA ACUSADA POR JD VANCE

 

Ricardo Valenzuela

Ante el dantesco panorama que han provocado los gobiernos del mundo durante tanto tiempo, analizábamos el consejo Mills al expresar que la gente debería de escoger el tipo de gobierno que provocara los mejores resultados, ya sea monarquía, dictadura, democracia etcétera. Pero, así como hay resultados diferentes, también hay formas diferentes de evaluarlos. Pero la historia no miente por eso la debemos utilizar para revisar las obras de los gobiernos en diferentes áreas del mundo y, ya bien ubicados, pasar a calificarlos.

Hace un par de años me hacía una entrevista con un economista a quien yo respeto y admiro, pero, en cierto punto del evento, la entrevista tomaba la fisonomía de un verdadero debate. Con la marcha del encuentro, al referirme al problema de una Europa estancada producto de su socialismo disfrazado, mi entrevistador, sin esconder su gran molestia y ya en tono de agresión, me revira reclamando que le hubiera colgado esa etiqueta socialista a Europa. Porque, según él, Europa era un gran ejemplo del capitalismo pues todos los factores de producción estaban en manos privadas.

UNION EUROPEA ¿EL 4th REICH SOCIALISTA?

Ricardo Valenzuela

Cuando en 1993 se anunciara con bombo y platillos el nacimiento de la Union Europea, echando mano del inspirador pensamiento de Victor Hugo articulado en 1849: “Llegará un día en que todas las naciones de nuestro continente formarán una hermandad europea, un día en que veremos a los Estados Unidos de América y a los Estados Unidos de Europa cara a cara, tendiéndose la mano a través de los mares,” pues yo, como toda la borregada, se lo comunicaba a mi padre lleno de entusiasmo por ese gran acontecimiento histórico pensando también él lo celebraría.

Y ¿Por qué no? Él habia vivido en Europa durante 15 años, se habia educado entre Bélgica e Inglaterra. Habia acompañado a su hermano Gilberto y al presidente Calles en su gira por todo el continente. Sin embargo, recibía la noticia con cierto halo de preocupación y me dice. “Por fin se salieron con su leperada, esto no es para celebrar, esto es el inicio de un nuevo socialismo disfrazado.” Me dejaba con la boca abierta y, para no perder mi entusiasmo, le achacaba a mi padre el haber expresado tal disparate al inicio de su confusión senil, tan presente en todos los Valenzuela en esa etapa de sus vidas. Una gran equivocación que después comprobaría.